Autoridades de Arabia Saudita anunciaron hoy la detención de ocho presuntos yihadistas del grupo Estado Islámico (EI), que planeaban un atentado contra el estadio de futbol Al-Jawhara de la occidental ciudad de Jeddah.
El Ministerio árabe del Interior precisó que los detenidos tenían previsto llevar a cabo un atentado terrorista el pasado 11 de octubre en el partido de clasificación para el Mundial de Rusia 2018, entre Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, al que asistieron miles de aficionados.
En un comunicado, el ministerio indicó que los yihadistas (combatientes islámicos) eran integrantes de dos células terroristas que recibían órdenes de un dirigente del grupo EI en Siria y que además del estado querían atacar a las fuerzas de seguridad en Riad y la norteña Tabuk.
La primera de las células estaba integrada por dos paquistaníes, un sirio y un sudanés, quienes tenían la misión de colocar un coche bomba en uno de los estacionamientos del estadio Al-Jawhara de la occidental ciudad de Jeddah el pasado día 11.
Los sospechosos fueron identificados como: Hassan Abdul Karim de nacionalidad Siria, Saliman Din Wafarmanullah y Naqshaband Khan, de Pakistán, y Abdul Azim al Tahir Abdullah Ibrahim, originario de Sudán, según un reporte de la cadena Al Arabiya.
El portavoz del ministerio, general Bassam Attiyah, reveló en una conferencia de prensa posterior, que la bomba había sido colocada en un "vehículo tamaño medio", el cual llevarían al estacionamiento del estadio, donde 60 mil aficionados asistían al partido válido para buscar un boleto para la Copa del Mundo.
Attiyah dijo que creían que la célula tenía planeado hacer explotar el coche bomba cerca de una de las estructuras del soporte para causar el derrumbamiento del recinto deportivo.
"Otro escenario, igualmente horrible, si es que habría ocurrido, era el hacer detonar el dispositivo mientras que los espectadores salieran del estadio", indicó y agregó que se ha estimado que el vehículo tenía capacidad para llevar un estimado de 400 kilogramos de explosivos.
El radio de explosión habría alcanzado hasta los mil 100 metros de altura y casi 800 mil metros cuadrados, precisó el general, sin dar mayores detalles de cuándo y dónde fueron detenidos los ocho sospechosos.
"Otros seis sauditas fueron detenidos y están siendo interrogados por tener presuntos vínculos con las células terroristas", concluyó el portavoz.
El estadio Al-Jawhara (Joya luminosa) es uno de los logros más importantes del reino, su construcción tuvo un costo total de alrededor de 500 millones de dólares, tiene cupo para 20 mil plazas de estacionamiento y puede albergar al menos 60 mil espectadores.
Desde fines de 2014, Arabia Saudita ha sido escenario de una serie de atentados reivindicados por el Estado Islámico, en su mayoría dirigidos contra la minoría chiita del país y las fuerzas de seguridad.
El grupo surgió en 2003 como una rama de la red Al Qaeda, aunque después se separó y tomó el control de amplias zonas de Siria e Irak, en donde en junio de 2014 estableció un califato que encabeza su líder al Abu Bakr al Baghdadi.
El EI, conocido como Daesh (su acrónimo en árabe), es reconocido internacionalmente por crímenes atroces que comete en nombre del Islam, como decapitaciones, lapidaciones, quemando vivas a sus víctimas, aunque también ha perpetrado innumerables atentados.