Un joven de 19 años asesinó a su propia madre luego de que ella lo regañara por llegar tarde a casa, y, además, borracho.

 

Eran las cinco y media de la mañana, cuando Henry Williams Villavicencio llegó a su hogar en el número 8 de la calle Hilarión Eslava, Alcalá de Guadaíra (Sevilla), España, donde lo esperaba su madre, Joy Mariana Villavicencio Gómez.

Al verlo entrar le reclamó, como lo haría cualquier otra madre, pero eso lo enfureció, la pelea subió de tono y comenzó a golpearla.

 

Los vecinos cuentan que escucharon los primeros gritos, pero no imaginaban el grado al que había llegado la pelea.

La mayoría de los golpes que recibió fueron en la cabeza, los médicos encontraron una contusión muy grave, que habría sido la que le provocó la muerte.

El cuerpo de su madre quedó tendido en el suelo, mientras él se quedó dormido. Cuando despertó, aproximadamente a las nueve y media de la mañana, avisó por WhatsApp a su hermano lo que había hecho, quien a su vez llamó a la policía.

Según los vecinos, la familia llevaba 15 años viviendo en la misma calle y jamás se les había visto ni siquiera bebiendo o fumando.

Mariana trabajaba desde hacía años en una empresa de ayuda a domicilio de la zona; llegó a Alcalá de Guadaíra con sus tres hijos, en busca de una oportunidad laboral, desde la región de Guayaquil, en su natal Ecuador, donde aún reside la mayoría de su familia. Tanto ella como sus hijos consiguieron hace ya muchos años la doble nacionalidad. 

Algunos piensan que el alcohol fue el detonante del ataque, pero no existe ninguna justificación. En redes sociales, sus familiares lamentaron la muerte de Mariana.

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