JIUTEPEC, MORELOS.- La conservación y estudio de animales e insectos ha despertado el interés para Ángel Uriel Córdoba Ávila, un estudiante de segundo semestre de preparatoria, quien analiza la estructura física de cada uno, los lugares donde habitan y qué es lo que comen.
Como parte de un proyecto de la asignatura de Biología, Ángel emprendió la recolección de insectos y algunos animales venenosos bajo la filosofía de no matarlos, por ello realiza trabajo de campo en donde busca distintas especies.
En su lista de conservación ya tiene un alacrán, una araña de campo, chinches, avispas, cochinillas y el un escarabajo Goliat.
Este último es el más preciado, pues mide unos siete centímetros de largo, su cuerpo es verde oscuro con puntos negros y sus alas están intactas.
Cada uno de los insectos antes mencionados son estudiados, por lo cual en una bitácora registran datos como su hábitat, lo que comen y anatomía, con el fin de conocer y tener un registro que ayude a investigaciones posteriores.
“Esto me gusta, creo que debemos darle un realce al conocimiento de la ciencia y biología, las personas no le dan importancia, pero creo que debemos mirar y conocer porque es parte de nuestra vida cotidiana y el futuro.
“Podemos analizar los animales y encontrar alguna cura a enfermedades, además, descubrir nuevas especies”, comentó.
Para el trabajo de conservación utiliza alcohol y otras sustancias, además deben manejarse con cuidado, pues las partes del cuerpo de cada insecto son frágiles.
El joven ha participado en una exhibición y busca concentrar más insectos en su lista, pues bajo la asesoría de su profesor, Rodrigo Vargas, ha logrado despertar el interés por la ciencia.
JOSÉ AZCÁRATE
jose.azcarate@diariodemorelos.com