Los italianos Bruno Gulotta, de 35 años de edad, y Luca Russo, de 25, murieron en el atentado perpetrado la víspera en Barcelona, España, que causó 13 víctimas y al menos cien heridos, confirmó el primer ministro, Paolo Gentiloni.

"Italia recuerda a Bruno Gulotta y a Luca Russo y se une en torno a sus familias. La libertad vencerá sobre la barbarie del terrorismo", escribió Gentiloni a través de su red social Twitter.

Previamente la sociedad Tom’s Hardware, para la que trabajaba Gulotta, dio a conocer su deceso.

El hombre, residente en la norteña localidad de Legnano, se encontraba de vacaciones en Barcelona al lado de su esposa y sus dos hijos pequeños, quienes resultaron ilesos durante el ataque.

La familia paseaba por La Rambla barcelonesa cuando fue embestida por la furgoneta con la que los terroristas realizaron el ataque.

Según algunos testigos, Gulotta pudo poner a salvo a sus hijos, pero fue centrado por el vehículo lanzado en zig zag y a fuerte velocidad.

Russo también vacacionaba en la ciudad catalana al lado de su novia, quien resultó herida durate el atentado, pero se reporta fuera de peligro.

El joven, con una licenciatura en ingeniería energética, residía en la localidad de Bassano del Grappa, en la norteña provincia de Vicenza.

El embajador italiano en España, Stefano Sannino, confirmó que tres de sus compatriotas resultaron heridos, incluida la novia de Russo.

"Los tres italianos heridos fueron inicialmente internados en hospitales de Barcelona. Dos ya fueron dados de alta y el tercero sufrió fracturas, pero sus condiciones no son graves", declaró el diplomático a la televisora Sky.

En el atentado realizado presuntamente por extremistas islámicos con una camioneta que atropelló a decenas de personas en La Rambla de la ciudad catalana, 13 personas perdieron la vida y al menos cien resultaron heridas.

Entre estas últimas habría 26 franceses y cuatro australianos, mientras que las víctimas mortales serían de más de 20 nacionalidades.

En tanto, el presidente italiano, Sergio Mattarella envió un mensaje de condolencias al rey de España, Felipe VI, en el que condenó los atentados en Barcelona y en la vecina localidad de Cambrils, donde al menos cinco terroristas atacaron a varias personas antes de ser abatidos por la policía.

 

 

"En estas dramáticas circunstancias el pueblo italiano se une firmemente al español, en un dolor común, en el pésame a las familias de todas las víctimas, independientemente de su nacionalidad y desea a los heridos una rápida recuperación", dijo el mandatario en el mensaje.

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