JIUTEPEC, MORELOS - El alcalde de Jiutepec, Rafael Reyes Reyes, confía en que la letalidad en el municipio por COVID-19 no sobrepase el 8.9 por ciento actual, porque sería muy grave para la economía un eventual retroceso al semáforo rojo por la epidemia.
Indicó que, a pesar de que el municipio es el de mayor densidad poblacional, los números de contagios y fallecimientos se han mantenido bajos en comparación con algunos puntos rojos en la capital del Estado.
Indicó que no se ha bajado la guardia en cuanto a las recomendaciones que debe seguir la población.
Sin embargo, agregó que está consciente de que las autoridades de salud pueden instruir el retorno al confinamiento y a la suspensión de las actividades productivas no esenciales debido a que, en general, el problema sanitario no ha sido controlado en el Estado.
“Evidentemente, si hay un riesgo sanitario lo vamos a tener que hacer; si tenemos una indicación de parte de la Secretaría de Salud del Gobierno Federal, o del Estado, entonces tendríamos que valorarlo”, dijo.
Y, agregó: “Nos preocuparía demasiado, por lo que implicaría en términos económicos el desgaste para las empresas y las familias”.
Añadió que durante los recorridos por las colonias ha constatado que mucha gente se quedó sin empleo, por la decisión obligada de las industrias o empresas de reducir sus plantillas laborales.
Recordó que Jiutepec aporta al Producto Interno Bruto del estado más del 50 por ciento, con más de diez mil comercios en todos los giros, para dimensionar el impacto que tendría un posible regreso al semáforo rojo.
En ese sentido, Rafael Reyes hizo un reconocimiento a los propietarios de Industrias Lavín, quienes a pesar del duro golpe que significó para ellos el incendio de la fábrica, la semana pasada, decidieron mantener su plantilla de trabajadores por el tiempo que les lleve la recuperación.
ANTONIETA SÁNCHEZ
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