Antes de empezar a depilar hay que medir los puntos de la ceja. Podemos hacerlo con un pincel, un delineador fino o incluso con un lápiz.
Para saber dónde debería comenzar, hay un truco en tres sencillos pasos:
- Apoyar el pincel de forma recto en el costado de la nariz, pasando por el lagrimal. Ese es el punto de inicio.
- El arco también lo va a definir el pincel. Apoyarlo al lado de la aleta de la nariz y cruza la pupila del ojo.
- Por último, la ceja debería terminar en el punto que se genera cuando el pincel pasa por el costado de la aleta de la nariz y por el vértice donde termina el ojo.