La Contaduría se encuentra entre las carreras universitarias que más han bajado su matrícula en los últimos años, debido, entre otros factores, al desinterés que los millenials o los nativos digitales de la Generación Z tienen en los números, señaló el ex presidente del Colegio de Contadores Públicos, en el marco del Día del Contador, este 25 de mayo. 

El contador público certificado, Rodrigo Rojas Morgado, estimó que el decrecimiento del número de jóvenes que se inclinan por esta área es de hasta un 55%. 

“La matrícula ha bajado en todas las instituciones, tanto privadas como públicas a pesar de que los contadores nunca dejarán de ser indispensables para los contribuyentes”, manifestó al hablar del tema. 

Rojas Morgado relató que, en el año 2000, hubo un boom de la carrera, que la ofrecían, desde los institutos profesionales de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), en las regiones oriente y sur, hasta el Tecnológico de Monterrey, campus Cuernavaca. 

Actualmente, esa oferta se ha reducido y la matrícula se ha contraído notoriamente. 

El especialista no descartó que la simplificación para el pago de impuestos, como por ejemplo la creación del Régimen Simplificado de Confianza (Resico) para personas físicas, y la idea de que los contadores no son necesarios, se encuentren entre las causas del fenómeno. 

Pero consideró que el factor que pudo haber incidido más en la depreciación de la carrera, es el económico. 

“La contaduría no es una profesión para hacerse rico; aunque sí se puede vivir bien, trabajando mucho y comprometiéndose”, señaló. 

En este sentido, refirió que para los contadores no hay tabuladores por sus servicios, como por ejemplo para los médicos, y esto, en algún momento afecta, porque muchos egresados que no lograron colocarse en el mercado laboral profesional en el momento indicado, terminaron por abandonar el ejercicio para dedicarse a otras actividades. 

Otro factor, ha sido el avance de la tecnología que, en áreas específicas, como la financiera, ha reducido las áreas de oportunidad para el crecimiento laboral en las instituciones, dijo, al señalar que los bancos son un claro ejemplo de esto, con cada vez menos atención personalizada. 

La suma de lo anterior, más el perfil que tienen las nuevas generaciones, “que no quieren echar raíces, y busca disponer de más tiempo para ellos, amén de su desinterés por desarrollar sus habilidades y adquirir nuevas competencias”, han determinado la caída de la matrícula, señaló. 

A pesar de esto, el ex presidente del Colegio de Contadores Públicos, con una carrera profesional de casi tres décadas, consideró que la Contaduría es un área del conocimiento especializado que siempre estará vigente, porque por más simplificación, seguirá siendo necesaria para dar certidumbre a los contribuyentes y para la buena administración de las empresas y para su cumplimiento con la reglamentación vigente, con base en un buen control interno. 

ANTONIETA SÁNCHEZ / antonieta.sanchez@diariodemorelos.com 
 

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