La Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 24 de enero como el Día Internacional de la Educación, esto se determinó el 8 de diciembre del 2018 en celebración del papel desempeñado por la paz y el desarrollo. Se adoptó parte de la agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, con el objetivo de que para 2030 todos los niños y niñas completen hasta su educación secundaria de manera gratuita, a fin de combatir las desigualdades y construir sociedades más pacíficas, justas e inclusivas. Esta agenda compromete común y universalmente a los países a que se enfrenten a sus retos específicos en búsqueda del desarrollo sostenible, y en cuanto a sus riquezas de recursos y actividad económica fijen sus metas nacionales para el cumplimiento de los objetivos.
La educación es esencial para el éxito de los 17 objetivos de Desarrollo Sostenible. Estos objetivos se centran en la erradicación de la pobreza, donde la educación es clave importante porque permite la movilidad económica ascendente, por esta razón fue indispensable ampliar el acceso a la educación y en perspectiva de género empoderar a las mujeres y niñas.
En la actualidad 262 millones de niños, niñas y jóvenes siguen sin estar escolarizados; 617 millones, no pueden leer ni manejan los herramientas del cálculo; menos del 40% de las niñas del África Subsahariana completan los estudios de secundaria, y unos 4 millones de infantes y adolescentes refugiados no pueden asistir a la escuela. Durante la pandemia de COVID-19 la mayor parte de los países anunciaron el cierre de las escuelas, lo que afectó a más del 91% de los estudiantes de todo el mundo. Esto provocó una alteración en su aprendizaje, sumándole que posterior a ello, la transición a la virtualidad fue complicada y más aún para aquellos niños y niñas de áreas marginadas que no tienen acceso a un dispositivo o a internet.
En el caso de México hubo zonas donde se optó por las clases a través de la televisión o radio escuela, tratando de resolver los retos frente a la pandemia para cubrir los objetivos de educación. Aunque el problema no se resolvió porque esta forma no garantizo, que los estudiantes tuvieran los conocimientos necesarios.
Por consiguiente; la pandemia frenó los avances que se llevaban en materia de educación a la manera de mejorarla a nivel mundial.